Conquista el verdadero sueño reparador con el colchón Lyra, que sorprende al combinar un sistema de resortes de alta resistencia con la malla Milk, un tejido innovador y exclusivo con aminoácidos que hidratan, nutren y rejuvenecen la piel durante el descanso. La malla contiene caseína, una proteína de la leche rica en fósforo, y fibras con nutrientes que actúan directamente en la piel, ofreciendo beneficios no solo estéticos, sino también para la salud. El suave tacto de la superficie del colchón con espuma hiper suave, combinado con espumas más firmes, completa la composición del Lyra. ¡Para despertar siempre renovado!
Modelo | L P A |
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Solteiro | 0,88 x 1,88 x 0,35m |
Solteiro King | 0,96 x 2,03 x 0,35m |
Casal | 1,38 x 1,88 x 0,35m |
Queen | 1,58 x 1,98 x 0,35m |
King | 1,93 x 2,03 x 0,35m |
* L (Largura) P (Comprimento/Profundidade) A (Altura)
Registro do INMETRO 007354/2017
"Me gustan los colchones que sean cómodos pero, al mismo tiempo, bien firmes. En el colchón Lyra de Bell’Arte Dreams encontré lo que considero esencial en un colchón."
"Ya conocía Bell’Arte por sus sofás, que son maravillosos. En cuanto supe que lanzarían una línea de colchones y camas, estaba expectante porque aún no había encontrado en el mercado productos que fueran cómodos y, al mismo tiempo, tuvieran un diseño moderno y sofisticado. Cuando tuve la oportunidad de conocer los productos de Bell’Arte Dreams, confieso que superaron mis expectativas. Fue difícil elegir el mejor colchón, porque todos, además de ser extremadamente cómodos, eran hermosos y diferentes a todo lo que había probado antes. Soy una persona que disfruta del “estar en la cama” y valoro mucho el confort y el bienestar. En mi colchón, además de descansar, hago mis lecturas antes de dormir, mis oraciones y reflexiono sobre el día siguiente. Por eso, tener una cama de calidad que también embellezca mi habitación es una prioridad para mí. Soy cliente y recomiendo Bell’Arte Dreams, literalmente, “con los ojos cerrados”."
¡Nuestro colchón es maravilloso! Cuando viajamos, extrañamos mucho nuestra cama, porque no hay colchón mejor.